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domingo, 29 de enero de 2012

EL BURRO DE SAN VICENTE

En mi tierra natal (Reino de Valencia, que ni por asomo tiene nada que ver con la región de Cataluña, ni tan siquiera en su dialecto) se cuenta una historia a modo de fábula que se le atribuye a San Vicente Ferrer (Padre Vicente Ferrer, para los agnósticos).
Cuenta que un día, un padre y un hijo andaban por un camino a lomos de un borrico. Al pasar por un poblado la gente comenzó a murmurar ─ Pobre animalito, los dos a lomos del burro “Explotadores, maltratadores de animales” ─  exclamaron algunos al ver el esfuerzo del équido (Equus africanus asinus para los de la LOGSE).
Avergonzado, el padre tomó la sabía decisión de bajarse del burro y dejar que su hijo fuera a lomos del ásnido.
Al pasar por otro poblado y ver al niño sentado y al padre andando, la gente murmuró ─ Mira el hijo bien descansado a lomos del burro y el padre ya mayor, andando.  Anda con el zagal, joven y con fuerzas y permite que su padre vaya andando. No sé qué vamos a hacer con esta juventud “Egoísta, mal hijo“ ─ Exclamaron algunos. Y nuevamente el padre avergonzado, optó por bajar al hijo y subirse él en el burro.
Prosiguieron su camino y en mitad del mismo, se cruzaron con un grupo de gente y sin más explicación estos comenzaron a gritar ─ ¡¡Explotador, mal padre!!  Tendrá cara el tío. Míralo, él bien descansado y el pobre niño andando. Desesperado el padre, ya sin saber que hacer, optó por bajarse del burro e ir los dos andando. Y nuevamente cuando estaban llegando al establo, al verlos pasar, las gentes comenzaron a reírse ─ ¡Pero serán tontos! Mira que tener un burro y los dos van andando ─ El padre miró al hijo lleno de confusión y comenzaron a cantar ─ El burro de San Vicente que lleva la carga y no la siente. Y ambos llegaron a la conclusión de que en esta vida, hagas lo que hagas, siempre habrá alguien a quien le parezca mal. O lo que es igual “Nunca llueve a gusto de todos”.
Algo y de forma muy similar le está pasando al señor Rajoy. Después de haber soportado durante más de siete años, las atrocidades de un gobierno que ni sabía dónde tenía la mano derecha, ni mucho menos la mano izquierda. Después de haber visto como han dilapidado las arcas del estado español. Está visto y comprobado, que haga lo que haga, siempre estará mal. Y lo que es peor, muchos esperan que en cuatro meses de presidencia, solucione las aberraciones que el gobierno socialista ha hecho en sus siete años de desoladora política.
Como en el ejemplo del burro: ¿Qué hacer?, difícil dilema. Sería más fácil obtener la cuadratura del círculo, que contentarnos a todos. Porque se haga lo que se haga, nadie lo verá bien.
A mi entender, el Sr. Rajoy debiera contentar a la mayoría. Es decir, si se empeña en alegrar a la Señora Merkel, ha de tener en cuenta que ésta no le tiene que votar. Y en estos momentos la mayoría es la que tiene en manos su voto. ¿Y cual es la mayoría? Más de cinco millones de parados que apenas pueden subsistir.
Durante los últimos siete años, más de un millón de pequeñas y medianas empresas han cerrado, y de esas empresas es de donde sale la cruel cifra de parados. Y de los privilegiados que aún trabajan, más de seis millones cobran salarios que dan pena. Esa es la gran mayoría, más de doce millones de votos. Si se suben los impuestos, quiere decir que muchas de las empresas pequeñas que aún subsisten, cerrarán por no poder soportar la carga fiscal, y millones de familias apenas podrán llegar a fin de mes. De nada sirve subir los impuestos si sólo unos pocos pueden pagarlos. La voracidad recaudatoria en estos momentos no sirve de nada, porque a muchos ya no les llega ni para comer. O como se suele decir “De donde no hay, no se puede sacar”.
¿Cual es la solución? De la misma forma que con las injustas leyes penales han convertido a España en un paraíso penal, donde la delincuencia campa a sus anchas.  ¿Por qué no convertir a España en un paraíso fiscal? Se abrió la frontera a la inmigración, ¿por qué no abrir la frontera al dinero exterior? Y la idea no es mía, todo hay que decirlo, en menor escala y a nivel local, la idea es del Alcalde de mi pueblo (Galapagar), quien con mucha habilidad, está dando enormes facilidades a todo aquel que quiera abrir un negocio en esta localidad. Si hoy en día alguien está dando facilidades para abrir un negocio es el ayuntamiento de Galapagar, que en 24 horas te dan el permiso de apertura y gratis. Esa es la solución. Para crear empleo hay que crear empresas que lo den.
Pues aun así, al alcalde de mi pueblo le pasa lo mismo que al burro de San Vicente. Haga lo que haga está mal hecho, sobre todo para los del anterior consistorio que dejó un agujero de 22.000.000 (Veintidos millones de euros) y muchos locales cerrados. Y como él bien dice ─  “Yo no estoy aquí solamente para pagar facturas. Estoy para hacer crecer el pueblo”.
Creo que el Sr. Rajoy debiera de tomar buena nota de esto. Consúltele, no lo tiene muy lejos, es de su propio partido.
Mientras tanto, seguiremos cantando “El Burro de San Vicente, lleva la carga y no la siente”. Hasta que la ilusión se nos vaya para Barranquilla.

© Joan Tudela 2012.


Invertir en Galapagar más facil que nunca http://www.gacetagalapagar.com/sociedad/464-invertir-en-galapagar-mas-facil-que-nunca

martes, 24 de enero de 2012

El candil de Diogenes

Se dice que Alejandro Magno quedó prendado de la riqueza interna de Diógenes, un mendigo cuya única posesión era una lámpara. Un día, el conquistador le preguntó por qué llevaba a todas horas encendido el candil. Diógenes le respondió: “busco al hombre auténtico de día y de noche, pero no lo encuentro.”
Alejandro Magno, asombrado por su respuesta, afirmó:
“He notado por primera vez que la riqueza no tiene nada que ver con el dinero.”
Sin embargo, Diógenes, jamás encontró a ese hombre auténtico cuyo concepto de la riqueza estuviera muy por encima del dinero.
Tal vez Diógenes murió, pensando que con el paso de los tiempos el hombre aprendería a ser justo y honesto, que el aumento de su sabiduría daría paso a un nuevo concepto de conocimiento, donde la verdadera riqueza consistiera en la humildad, la integridad, la justicia y sobre todo la honestidad.
Lo lamentable de todo esto es que si Diógenes levantara la cabeza, arrojaría el candil a las fauces del hades y horrorizado contemplaría que el conocimiento del hombre avanza inversamente proporcional a su sabiduría.
Hoy en día se reúnen la patronal y los sindicatos, y firman un bochornoso aumento de un 0,5 % del sagrado salario de un obrero y se quedan igual, es más hasta pueden dormir tranquilos. Unos, porque ven que así seguirán aumentando sus beneficios, amparándose en una crisis que les favorece, y los otros, porque han visto aumentada sus cuentas corrientes por no haber puesto impedimento alguno a tal denigrante aumento.
Se efectúan reformas laborales que harían vomitar de repugnancia a los antiguos negreros y comerciantes de esclavos, donde el trabajador cada día tiene más encima la espada de Damocles del despido y es acosado y amenazado constantemente con lo fácil que resulta echar a un trabajador a la calle. Y a pesar de que esto ha demostrado que no sirve para crear empleo, se siguen trazando estas horrendas y torturantes reformas laborales.
La clase política y social alta, está rodeada de familias, que a lo mafioso dilapidan el dinero de los trabajadores, y sin el menor ápice de compasión despilfarran y aniquilan el poder adquisitivo del ciudadano medio.
Los jueces carentes de valores humanos, aplican las leyes a su antojo, en un país donde la justicia debiera de defender al débil e inocente, este es pisoteado diariamente por injustas sentencias.
Es más, creo que si Alejandro Magno levantara la cabeza, alzaría su espada con la misma rabia que con la que el pueblo atormentado por las atrocidades e injusticias de los poderosos y gobernantes, se acuesta cada noche cargado de impotencia.
Sinceramente, cada día me cuesta comprender hacía donde nos dirigimos. En una era donde el homo-sapiens está dominando los avances científicos y tecnológicos, y no es capaz de encontrar un remedio para el hambre en el mundo. Donde la avaricia de amasar dinero, está llevando a limites apocalípticos a está humanidad.
Mi madre  decía: “La avaricia rompe el saco”. Es probable que toda esta avaricia y depravación que estamos sufriendo nos lleve a un holocausto, por qué así no podemos continuar.
Y mientras el espíritu de Diógenes sigue buscando al hombre autentico.
© Joan Tudela 2012

El motor de agua de Arturo Estevez Valera

El motor de agua de Arturo Estevez Varela

El invento del extremeño quedó en punto muerto por orden del Generalísimo tras recibir un informe desfavorable de la Escuela de Ingenieros.
No obstante Franco sabía muy bien que, la presión internacional podía borrar a España del mapa. Nuevamente el poder, la mano negra del Club Bielderberg, hacia su aparición.
Pese a probar y demostrar en numerosas y masivas exhibiciones públicas por toda España que su motor funcionaba con agua, la superioridad mandó ponerlo en punto muerto y olvidarse para siempre del 'invento' del extremeño Arturo Estévez Varela. La orden, al parecer, llegó de la más alta instancia, nada menos que del mismísimo general y caudillo Francisco Franco. El cual decidió zanjar la polémica entre los que defendían la viabilidad del proyecto y los que sostenían la imposibilidad de que pudiese llevarse a la práctica. Con ese fin encargó a la Escuela de Ingenieros un informe técnico sobre el particular y a la vista del dictamen desfavorable ordenó que no se volviera hablar del asunto, porque «ya se ha hecho bastante el ridículo».

Las implacables leyes de la mecánica y la termodinámica a las que recurrieron los ingenieros desmontaron las teorías de Estévez Varela, aunque para éste no debían ser desconocidas puesto que tenía el título de perito industrial. Para los técnicos superiores el proyecto del motor de agua era materialmente imposible de poner en práctica, al menos tal como entonces se planteaba.

Para los hombres de ciencia el ingenio del extremeño era una pura superchería, uno más de los infinitos intentos por lograr el movimiento continuo o hallar la piedra filosofal. Entre el pueblo, sin embargo, se observaba como una posibilidad para acabar con la dependencia de los combustibles derivados del petróleo. Dentro del escepticismo latía la esperanza en que el motor de agua se haría realidad.

Algo tan sencillo que se estudia en la EGB, como la descomposición del agua por medio de la electrolisis, quedaba tirada por el suelo.

Las exitosas demostraciones que realizó por todo el país hicieron de Arturo Estévez un hombre famoso al que los medios informativos prestaban una gran atención. El extremeño fue invitado en varias ocasiones de un programa que presentaba en TVE Rafael Escamilla, conocido comentarista de motor. La prensa publicaba frecuentes entrevistas con el inventor e informaciones sobre su invento, mientras la radio, pese a que entonces apenas se ocupaba de la actualidad, también dedicaba algún tiempo a esa novedad.

Desde fuera pero también desde dentro del Palacio del Pardo se seguía con vivo interés todo lo relativo al descubrimiento que tantas expectativas suscitaba y que tal vez -¿por qué no?- podía convertir a España en potencia mundial. Desconfiado por naturaleza de lo que decían los medios su excelencia pidió a los Ingenieros Industriales que le aclarasen las ideas y sobre el pronunciamiento técnico no dudó en fusilar el invento.

Fallecido

Después de fallecer en el anonimato, Arturo Estévez Varela ha vuelto a adquirir el renombre que tuvo tres décadas atrás, a raíz del reportaje publicado por HOY en el número del pasado 16 de octubre donde se daba cuenta de que su 'invento', que tanto interés despertó en su momento, era actualmente objeto de investigación por la Universidad de Minnesota y el Instituto de Ciencia Weizmann, en Israel, según la revista NewScientist. El trabajo periodístico ha tenido amplia repercusión en Internet, donde se encuentra reproducido en numerosos sitios, a la vez que es objeto de comentarios en foros y 'blogs' relacionados con las energías alternativas tanto españoles como extranjeros.

Como era de suponer y se predecía en el reportaje el 'padre' del motor de agua no ha vivido para enterarse de la noticia de que su idea parece que está siendo tomada en serio y estudiada a fondo su viabilidad. En efecto, en Sevilla donde residió la mayor parte de su vida murió hace ocho o nueve años Arturo Rufino Estévez Varela -ese es su nombre completo-, nacido en Valle de la Serena el 31 de julio de 1914.


Fue  un domingo, el 29 de abril de 1971 cuando miles de ojos, entre asombrados y expectantes, vieron sobre un estrado un pequeño motor de explosión al que se le había adoptado una especie de globo y un reducido recipiente en su interior. En él se vertió un litro de agua de la que previamente había bebido un niño.
Tras algunas manipulaciones y de algunas intermitentes explosiones el motor se puso en marcha. El inventor acercó su nariz al tubo de escape y aspiró el gas que salía para exclamar ante la sobrecogida concurrencia: ¿oxígeno!.

Posteriormente en el año 1982. Dos mecánicos de Almussafes, construyeron un pequeño catalizador, que aplicado en el mismo sitio que la bomba de la gasolina. Descomponía el hidrógeno, y hacía funcionar el motor. Las imágenes que pude ver, uno de los mecánicos respiraba el oxigeno que salía por el tubo de escape y bebía del agua que, goteaba del mismo, cuando el motor quedaba en relentí.

De estos mecánicos nunca más se supo, al día siguiente de publicada la noticia y de anunciada la patente, desaparecieron en el más puro anonimato. Personalmente efectué algunas investigaciones posteriores para, intentar saber que había ocurrido, al margen de un mutismo y silencio total me encontré con una enrome barrera, en la que incluso se me llegó a amenazar.

Estamos girando por un espacio interminable, a una velocidad inconcebible, todo está rotando alrededor nuestro, todo se está moviendo, por todas partes hay energía. Debe haber alguna manera de en forma más directa hacer disponible para nosotros esta energía. Entonces, con la luz obtenida del medio, con la potencia derivada de ello, con cada forma de energía obtenida sin esfuerzo, del almacén por siempre inextinguible, la humanidad avanzará a pasos gigantescos. La mera contemplación de estas magníficas posibilidades expande nuestras mentes, fortalece nuestras esperanzas y llena nuestros corazones de supremo placer." —Nikola Tesla, 1.891 (Original en Inglés, trad. por Luis Prada)


Hay modelos de coches con agua desde el principio de la automoción, igual con la electricidad sin cables de Tesla, los mercados y monopolios han echo que esto no salga, ahora los estados pagan su cuota ecológica, su impuesto por C02, que hipocresia, quieren, hay planes, por eso la campaña de Al Gore para que los ciudadanos también tengan que pagar un impuesto medioambiental por cabeza, además del que paga el estado con nuestros impuestos, el gobierno español tiene la patente desde los 70 de un motor de agua, como España muchos otros paises, como filipinas, pero siempre aparece la OMC y el FMI, diciendo que se puede y que no se puede hacer. Hay muchas patentes en el mundo sobre energias libres, sin contador no hay negocio, ni esclavo, sin surtidor no hay cliente. Pero ya empieza la gente en sus garajes a cacharrear y la liberación de la energía será una de las claves de este siglo

¿Hasta cuando vamos a quedarnos sentados sin exigir esta energía o a organizarnos para crearla nosotros mismos?,por supuesto quieren traspasar el negocio, hacer surtidores de hidrógeno, que no se escapen los dolares, los euros, pero esa es la misma trampa.

Y está siendo efectiva la recuperación de la tecnología del “motor de agua” del extremeño Arturo Estévez Varela que demostró públicamente que son viables otras vías de automoción distintas a las de los hidrocarburos con sencillas pero efectivas y económicas reformas en nuestros vehículos de automoción.

Las pistas para recuperar sus avances inventivos tecnológicos en los vehículos de automoción se pueden encontrar en sus declaraciones públicas e inéditas, que recientemente hemos encontrado en los medios de comunicación.

Restauremos el precioso mosaico de su legado.

En primer lugar recordemos que “Su propósito inicial fue el de construir un motor nuevo... “pero comprendí que sería un perjuicio económico para todos, así que preferí estudiar la solución para los motores convencionales, tanto de explosión como de combustión interna.”

Con ello, partiendo de esta base, su inventiva se centró en obtener un combustible derivado de materiales de fácil acceso para todos los colectivos, materiales comunes y de uso cotidiano, y baratos.

Su genialidad y buena voluntad nos señaló que era posible encontrar en el elemento más común en nuestro planeta, el agua, una vía para alcanzar una automoción económica, sostenible y saludable.

Mi pregunta es la siguiente. ¿Porque el ser humano no sé desprende de su avaricia y hace que el mundo sea un lugar habitable y más feliz para todos? Meditarlo y mirar hasta donde llega la manipulación.

(C) Joan Tudela 2012

miércoles, 11 de enero de 2012

El último que pague las copas.

El tan esperado cambio que necesitábamos, ya lo tenemos. Nadie dijo que iba a ser fácil. Es más, el Sr. Rajoy ya lo venía advirtiendo. “Todos nos tenemos que apretar el cinturón”, y por los últimos acontecimientos, creo que voy a tener que buscar a un talabartero, para que me haga más agujeros en él, porque me viene bastante holgado.

Y en parte estoy de acuerdo. Para salir de esta crisis hay que apretarse nuevamente el cinturón, y esta vez ha de ser de forma voluntaria y consciente de ello. Por lo que se avecinan tiempos muy difíciles. Y cada vez cobran más fuerza, las discutidas profecías Mayas y su enorme vinculación con el Apocalipsis Bíblico.

Pero alejándonos de lo que pudiera parecer ciencia ficción, la juerga de los socialistas nos ha salido cara. Aquí, alguien se ha dilapidado en fiestas, orgías, putas, cocaína y sospechosas adjudicaciones a familiares y amigos más allegados, más de veinte mil millones de euros (20.000.000.0000). Y a la salida han dicho, “El último que pague las copas” Y han dejado al Sr. Rajoy para que pague la fiesta, y ahora le toca pasar la gorra para que entre todos paguemos el tan desmesurado despilfarro. Y aquí, al que suscribe, que no se ha comido un torrao; que ha visto como sus propiedades, negocio, y solvencia, que con tanto esfuerzo y trabajo le costó conseguir, se han esfumado por culpa del mal gobierno socialista. Ahora me toca ver como mi patronal, se niega a cumplir la subida salarial pactada en el convenio, amparándose en la crisis y apoyada por los sindicatos que tiene a sueldo, que de seguro no van a hacer nada. Y encima de que muchos vamos a ver reducido nuestro salario (que ya es para echarse a llorar cada vez que recibes la nómina), con la subida del IRPF, si antes no llegábamos al día 15 de cada mes, ahora no vamos a llegar ni al día 5. Por poner un ejemplo, con ese sueldo no pagas ni la factura del gas ni la de la luz. Que alguien me explique: ¿cómo vamos a comer? Y esto es así. Aquí hay que pagar las copas que otros se han tomado, porque si no, La Merkel y El Sarcosi, dueños del burdel, enviarán a sus matones y nos echarán a la “Puta Rue”.

Así que nuevamente a tragar y a pasar por el aro. Pero… Como en toda cuestión siempre hay un pero. Si yo tengo que pagar parte de la fiesta, también puedo exigir que se adopten ciertas medidas para que esto no vuelva a ocurrir, y para ello se hace urgente un castigo ejemplar. Así que, alguien ha de irse a la cárcel. Y al decir alguien, me refiero a mucha gente.

Cada vez estoy más convencido de que el caso Urdangarín, no es ni más ni menos que una cortina de humo que les ha venido muy bien a los socialistas. Primero para debilitar la ya muy maltrecha Monarquía Española y segundo, para alejar la luz de todos los despilfarros, malversaciones y robos, que los socialistas han hecho durante todos estos años.

Mientras tanto, los “Indignados de Cayo Lara”, siguen haciendo sus tonterías y echando balones fuera para presentar como es su costumbre, al señor Rajoy como el culpable de todas nuestras desgracias.

Yo estoy dispuesto a asumir nuevamente esos recortes, y ya veremos si lo podemos aguantar. Pero repito, alguien se tiene que ir a la cárcel. No me sirve que sólo se vaya el Sr. Urdangarín, ni que al Sr. Camps se le crucifique por seis trajes. Los Eres falsos de Andalucía, las juegas de prostitutas y coca, el estudio del clítoris femenino, la malversación de la SGAE, las dilapidaciones en promociones del Catalán, las gasolineras del Sr. Blanco y suma y sigue. Todo esto no puede quedar impune y alguien ha de ir a la cárcel por ello. Porque si no, yo me niego a pagar la parte que me corresponde de la fiesta, y lo digo con pleno conocimiento de causa. Por poner otro ejemplo que no me pilla muy lejos. El Alcalde de mi pueblo (al que Dios le de mucha salud), cada día tiene que lidiar con unos enormes toros de afilados cuernos, para poder primero, pagar las facturas de su anterior consistorio (Más de 22.000.000 de euros)  y segundo, poder llevar a cabo su programa electoral que nos puede sacar del atolladero.

Y añadiré, sin que suene a amenaza, que el Nuevo Orden Mundial está acechando. Las masas se están movilizando, y  el pueblo lo acogerá con muy buenos ojos con tal de poder respirar y salir de esta miseria en la que la oligarquía económica nos ha sumergido, y a los que les han venido muy bien los pactos con los países socialistas que curiosamente son los emergentes a costa del empobrecimiento y explotación del pueblo.

El pueblo ya no es el tonto que durante siglos ha venido aguantando el feudalismo y las teocracias aplastantes. El pueblo ahora tiene voz y es más numeroso, y ha de ser escuchado.

 Por otro lado, si no se dan prisa en solucionar todo esto, estaremos pendientes por si aparece “El hombre con el cántaro de agua”. Que luego nadie diga que no lo vio venir, y a buen entendedor con pocas palabras bastan.

Así que, lo de que el último pague las copas no me vale. Alguien tiene que ir a la cárcel.

© Joan Tudela  - 2012